El
mundo es mi representación
He
estado meditando un poco sobre el concepto de “Ilusión” el
famoso enunciado que Schopenhauer maneja al principio del primer
capítulo de su obra mas importante “El mundo como voluntad y
representación” y aquí
muestro un extracto:
«El
mundo es mi representación»: esta es la verdad que vale para todo
ser viviente y cognoscente, aunque solo el hombre puede llevarla a la
conciencia reflexiva abstracta: y cuando lo hace realmente, surge en
él la reflexión filosófica. Entonces le resulta claro y cierto que
no conoce ningún sol ni ninguna tierra, sino solamente un ojo que ve
el sol, una mano que siente la tierra; que el mundo que le rodea no
existe más que como representación, es decir, solo en relación con
otro ser, el representante, que es él mismo...>>
Pero
como el reconoce párrafos mas adelante ( y sobre lo que es sencillo
quedar convencidos con un somero repaso por los textos de la doctrina
“Vedanta Advaita” los “Upanishad” y demás textos
hinduismos sin pasar de largo por el “Yoga Vasistha” ya lo
he mencionado en otra ocasión) la idea ya se venía manejando desde
tiempos muy antiguos. Era una verdad bastante machacada y dice en el
mismo primer capítulo.
“Esta
verdad no es en modo alguno nueva. Se hallaba ya en las
consideraciones escépticas de las que partió Descartes. Pero fue
Berkeley el primero que la formuló claramente: con ello ha contraído
un mérito inmortal en la filosofía, si bien el resto de sus
doctrinas no se puede mantener. La primera falta de Kant fue el
descuido de ese principio, tal y como se ha explicado en el apéndice.
En el último de sus tratados: On the philosophy of the Asiatics;
Asiatic
researches, vol. IV, p.164, W.Jones atestigua lo tempranamente que la
sabiduría hindú conoció esa verdad fundamental, ya que aparece
como el principio fundamental de la filosofía vedanta atribuida al
Vyasa”
Lo
anterior no se refiere a una negación del concepto de “materia”
en otras palabras: no afirma que los árboles, las rocas, el mar no
exista; que sea una especie de fantasía o efecto de birlibirloque,
de encantamiento o magia... pues sería una estupidez pensar en algo
semejante.
Pero
a menudo tomo consciencia de lo tangible de esta verdad. ¡Y como
nuestra representación puede ser tan frágil y verse alterada por
una multitud de factores!
Incluida
nuestra apreciación al arte. Las drogas alteran esta forma de
percepción y son a mi ver el ejemplo mas claro de la alteración de nuestra representación del mundo. Por ejemplo:
Me
acuerdo de la primera vez que probé el Cannabis... me regalaron un
cogollo... y arranqué un trocito y comencé a mascarlo...
Estaba
gomoso resinoso... y en la boca se escuchaba "Squitzzz,
Squitzzz, Squitzzz..."
Pasaron
20 minutos... y me dije:
-¡no se siente nada...! cogeré otro pedazo...
Arranqué
otro pedazo, tres veces mas grande que el anterior y me lo bajé con
un buen trago de cerveza.
Lo
que mi experiencia no me iluminaba era de que aquel, era del tipo de
Cannabis mas mordedor y ponzoñoso que pudiera haber...
Para
quién no lo sepa el Cannabis si suele tener efectos alucinógenos.
Recuerdo
que fui a la cama a leer pero como no me podía concentrar, puse algo
de música y regresé a la cama. Estuve un muy buen rato así,
inmerso en una sensación de frustración. Hasta el momento no había
notado ningún síntoma fuera de lo común. Y comencé a dudar (como
todo primerizo) si no me habían dado gato por liebre.
Todo
sucedió muy repentino. De forma rápida, fugaz, vi como una araña
negra de unos cinco centímetros estaba trepando por mi brazo y
recuerdo que me lo tomé con mucha tranquilidad
-¡JAJA!
una araña...
Me
tiré a la cama nuevamente, y al instante me levanto como un
condenado...
-¡Mierda
una araña! -exclamé
Busqué
la araña por toda la cama y no había nada.
Lo
siguiente fue una alteración en la percepción del color rojo. Todo
lo veía mas caliente, el blanco era blanco pero con algo de matices
rojos, un poco anaranjado, no sé si me explique. Luego comenzó esa
sensación de distorsión, como si las cosas estuviesen echas de
gelatina. Y la sed..., una sed intensa.
Claramente
podía percibir como si mi temperatura corporal se hubiese disparado
hasta 45° me alarmé un poco. Fui por el termómetro y era de 36.4°
si mal no recuerdo. El termómetro se me cayó al piso y el mercurio
se desperdigó. Algo muy notorio que recuerdo es que cualquier objeto
lo examinaba con un interés especial. Realmente convencido de que
había algo interesante en ellos. Y aquí es donde entra una vez mas
el concepto de “El mundo es mi percepción”
En
ese estado mi consciencia percibía las cosas de una manera distinta
a lo común. Lo que no era tan bello me parecía mas bello, lo que no
era feo lo hacía ver en lo que parecía su estado mas objetivo...
Algún día me extenderé mas sobre todo esto. Aquella experiencia
fue muy divertida, una especie de juego. Pienso que podría servir para ejemplificar de una manera mas o menos próxima esa frase "El mundo es mi representación"
Por último. Existen algunos libros muy interesantes que tratan el tema de la percepción y las drogas de una manera mas exhaustiva...
Por último. Existen algunos libros muy interesantes que tratan el tema de la percepción y las drogas de una manera mas exhaustiva...
Aquí
les dejo la lista con tres de los mejores ejemplares para quién
desee ahondar en el tema.
1.-
Las puertas de la percepción--- Aldous Huxley
2.-
Sobre el Hachís --- Walter Benjamin
3.-Paraísos
Artificiales --- Charles Baudelaire
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