Yo no se si deba escribir esto aquí. Lo pienso. Al final me convenzo de que es importante. Porque este blog no es otra cosa que un cuaderno de apuntes personal. Un experimento. Un registro para mi, de mi mismo; al paso del tiempo. Ya lo he manifestado antes.
He meditado y pensado sobre la gente. La gente que quiero. La gente que ha estado en mi vida. Le analizo. Medito. Pongo consciencia en ello. Pongo consciencia en mis sentimientos. Le reduzco a lo mas abstracto hasta llegar solo a su esencia mínima. Un punto de luz en el espacio. Una exhalación. un Vaho.
Hago un examen microscópico. Disecciono su naturaleza, su médula. Y a ese nivel de consciencia. A ese nivel de reducción, de abstracción y rechazando todo tipo de apego, rechazando cualquier tipo de ego. Rechazando cualquier negación a la soledad. Comprendo que hay gente, poca gente. Quizás una o dos personas si somos afortunados, cuya falta duele en verdad.
Su ausencia duele como si hubiesen arrancado un trozo de nuestra carne. Y me pregunto. ¿Por qué me duele tanto? ¿Por qué? No se trata de un apego insano. No es una dependencia. No es el ego. No es el miedo a la soledad. No se trata de ser mejor o peor persona. Va más allá. Si no es todo lo anterior ¿Entonces qué es? ... ¿Por qué duele tanto? ¿El amor? A estas alturas creo que experimento un amor mas universal que se manifiesta como un deseo vivo de saber que florece. De saber que la vida es benigna con ella. Y uno piensa y se cree capaz de hacer sacrificios en pos de su bienestar y su felicidad. Pero somos humanos. Y cuando medito y tomo consciencia, me digo: aquí falta algo. Aquí está su lugar. Mi corazón palpita, no se desangra, pero han arrancado un trozo a dentelladas. Y me duele tanto que aveces siento que se detendrá.
Me alegro cuando pienso que es feliz y libre. Pero ahí dentro de mi algo ha sido arrancado y mis lagrimas fluyen. No puedo evitar extrañarle muchísimo. Por naturaleza propia. Lo sé. La soledad es un bien, le cultivo como un tesoro. Pero aún con esa forma de ver el mundo hay lugar para los que son especiales. Los montones de gente no me ofrecen atractivo alguno. Solo son muchedumbres idiotizandose entre si. Superficiales. Pero esa gente, esos seres queridos que tienen el poder de marcar nuestra alma de una manera tan profunda jamás se pueden olvidar. No hay nada que los sustituya.
No puedo evitar extrañarle muchísimo. Pero es importante entender y tomar consciencia de las circunstancias que aveces no son favorables. Aunque hablo de gente en plural. En realidad me refiero a una en especifico. Pero los detalles los guardo en mis sentimientos.
Que este apunte sirva para que cada uno piense en su persona especial.
Porque yo la mía la siento tanto en el alma y le quiero, quizás sea la persona con mas vida que he conocido.
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